Cuando se trata de tu barba, hay dos posibilidades. O te toca una barba densa de leñador o una barba más modesta. Primero que nada creemos que ninguna es mejor que la otra. Se trata solo de genética. Si te tocó tener una barba irregular, sigue estas sencillas recomendaciones para sacarle el mejor partido.
¿Por qué algunas barbas son irregulares?
La barba culmina su desarrollo cuando cumples 21 años. La densidad que alcances se debe a tus hormonas. Si tu barba está menos tupida en ciertos puntos es porque ahí tu cuerpo produce testosterona en niveles más bajos. Esto es lo que causa los patrones de crecimiento irregulares. Y algunas condiciones externas como el estrés, pueden acentuarlos.
Pero una barba irregular no te limita a experimentar con ella. Puede ayudarte a elevar tu estilo si en vez de esconderla, sabes jugar con ella. Tan solo piensa en las barbas de Keanu Reeves, de James Franco o de Chris Pratt. No son abundantes pero saben cómo manejarlas en beneficio de su imagen.
Solo necesitas un poco de paciencia, estrategia y cuidarla desde adentro para obtener la mejor versión de tu barba.
1. Paciencia
Lo primero que te recomendamos es dejarla crecer. Esto no solo requiere paciencia, sino que la mantengas bien cuidada. Te recomendamos empezar desde cero para asegurar que el crecimiento ocurra de forma más uniforme.
Las primeras dos semanas no serán fáciles. Es cuando los patrones irregulares en tu barba se hacen más visibles. No te des por vencido. Conforme la barba crece, adquiere vida propia. Los vellos empiezan a tomar diferentes formas, se rizan y abarcan más espacio. Después del primer mes, tu barba comenzará a verse más pareja.
Asegúrate de darle mantenimiento para que se vea intencional, no como de náufrago.
Afeita los vellos sobrantes alrededor de tus pómulos, tu quijada, nariz y labios.
Cuando tu barba crece de manera controlada y recibe mantenimiento recurrente, notarás que empezará a verse más pareja y cualquier hueco será menos notorio. Aprovecha esta fase para experimentar con diferentes looks. Prueba con un bigote más tupido, un goatee o una barba más fina. Una vez que obtengas el largo deseado y un estilo definido, es cuando un poco de estrategia va mucho muy lejos. Sigue leyendo.
2. Estrategia
Piensa en el cuidado que le das a tu cabello. Lo lavas, lo acondicionas, lo cepillas, usas productos para estilizarlo y mantenerlo con brillo. Lo mismo debes hacer con tu barba. Se trata de tomar lo que ya tienes y darle la forma que quieres.
La limpieza es el punto de partida
Lava tu cara en la mañana y en la noche con un jabón neutro para permitir que tus poros respiren. Poros tapados equivalen a vello que no puede crecer como se debe. Si quieres ir un paso extra, aplica un exfoliante dos veces por semana para remover las células muertas y promover el flujo sanguíneo que contribuye al crecimiento del vello facial.
Acondiciona, acondiciona, acondiciona
El vello facial seco puede volverse quebradizo y acentuar más una barba irregular. Por eso es importante mantenerlo acondicionado. Te recomendamos usar aceites esenciales como el de coco o de jojoba, que humectan, reducen la inflamación y lo mejor, cuestan poco.
Cepillar es controlar
Con un buen cepillado es posible crear la ilusión de una barba más tupida. Cepilla tu barba de manera vertical al menos una vez al día. Esto ayuda a posicionar los vellos más largos de manera que cubran los espacios desiguales.
3. Cuídala desde adentro
No es secreto que una apariencia saludable comienza desde dentro. Incluso cuando se trata de tu barba. Por eso es esencial mantenerte bien hidratado, dormir ocho horas diarias y comer alimentos ricos en proteínas y omega 3. Aunque no te van a brotar vellos nuevos, estarás fortaleciendo los que ya tienes. Y eso puede hacer toda la diferencia.
El ejercicio también ayuda a mantener tu circulación y regeneración celular en niveles óptimos. Si ya llevas un estilo de vida saludable, bien por ti porque tienes la parte más difícil ya cubierta.